Estudiar un ciclo formativo de Educación Infantil significa aprender todo lo relacionado con las guarderías y las primeras etapas de la educación, que van de los cero a los tres años. Uno de los temas tratados son los espacios didácticos. Veamos en qué consisten.
Qué son los espacios didácticos
En el diseño y la creación de espacios para los más pequeños, el principal objetivo es el desarrollo cognitivo de los niños que van a la guardería. Los espacios didácticos deben estar adaptados a la edad y la altura de los alumnos. Pueden agrupar diferentes materiales didácticos en áreas distintas, como son la cultural, la matemática, la sensorial o la lingüística.
Para entenderlo con claridad te contamos algunos ejemplos de espacios didácticos.
Ejemplos de espacios didácticos
Si estás pensando en rediseñar tu guardería o espacio infantil, estos ejemplos te pueden ayudar:
- Espacio de lectura: no solo las sillas y mesas sirven para leer; piensa en colchonetas o pufs, ya que pueden ser una alternativa para no tener que pasar tanto tiempo sentados en una silla. Aunque no sepan leer, ver libros con texturas o colores seguro que les encantará.
- Espacio para el movimiento: no debemos olvidar que hay niños muy activos de los cero a los tres años, y limitarles los movimientos puede entorpecer su aprendizaje. Camas elásticas, columpios o pelotas pueden servirnos para que estén más concentrados y menos inquietos.
- Espacio numérico: empezar a contar, apilar y separar por colores puede ser la mejor manera de aprender con bloques apilables.
- Espacio para la creatividad: un modo de fomentar su creatividad es no tener límites para desarrollarla, y una buena manera de empezar puede ser forrando las mesas con papel de estraza. No tendrán límites para dibujar y escribir en ellas.
- Espacio para la música: instrumentos musicales de madera, música para niños y un espejo para fomentar el baile pueden ser algunos de los recursos de este espacio didáctico.
Como ves, son muchas las propuestas e ideas para crear tus propios espacios didácticos en tu guardería. Solo tienes que imaginarlo para ponerlo en práctica y conseguir un mayor desarrollo cognitivo de los niños.