Algunas profesiones son más vocacionales que otras y, sin duda, el trabajo del educador infantil es una de ellas. Hoy te explicamos qué habilidades debería tener un buen educador infantil para desempeñar bien su trabajo.
Si tienes claro que quieres dedicarte al mundo de la educación infantil, el título de técnico superior de Educación Infantil te permitirá trabajar en todo tipo de centros educativos y de ocio: jardines de infancia, casas de cultura, bibliotecas, granjas escuela, etc.
Cinco habilidades necesarias para ser un buen educador infantil
El perfil ideal de educador infantil debería contar con las siguientes habilidades:
1. Empatía. Un buen educador de la etapa infantil debe mostrarse cercano y comprensivo y tiene que ser capaz de entenderse con los pequeños. Una actitud empática también facilitará la relación del profesional con los padres y el resto del equipo docente.
2. Responsabilidad. Para cuidar y educar a más de una decena de niños a la vez, hay que ser responsable y conocer bien los derechos y los deberes tanto de los menores como de uno mismo.
3. Compromiso. El proceso de aprendizaje de los niños es un viaje largo y constante, por lo que un maestro de infantil siempre debe estar comprometido con su trabajo y sus objetivos.
4. Atención. Detectar y prevenir la aparición de problemas, tanto en el proceso de aprendizaje como en el comportamiento de los niños, no es una tarea fácil. Un educador debe fijarse en los detalles y, además, debe saber interpretarlos.
5. Creatividad. Ser creativo es una característica básica para llegar a ser un buen educador infantil. Esta habilidad influye directamente en la calidad del método educativo, que tiene que ser dinámico y motivador para estimular a los alumnos. En esta etapa, la imaginación es muy importante e influye positivamente en el desarrollo de los pequeños.
