El consignatario es una figura cada vez más relevante en las operaciones de transporte de mercancías por vía marítima. Si quieres saber qué es un consignatario y cuáles son sus funciones, te lo explicamos a continuación.
¿Qué es un consignatario?
Si te estás preguntando qué es un consignatario, debes saber que se trata de una persona o empresa que se encarga de recibir las mercancías de un tercero, conocido como consignante. Según la legislación española, el consignatario es el representante del buque y, por tanto, el responsable de llevar a cabo las gestiones necesarias para el despacho del buque en el puerto.
En las operaciones de comercio internacional, la figura del consignatario cuenta con una gran responsabilidad. Y es que no solo se ocupa de gestionar la mercancía una vez que llega a su destino, sino que además es el agente responsable del bill of landing, documento fundamental en un contrato de transporte.
Funciones del consignatario en el comercio internacional
Con el objetivo de garantizar el buen funcionamiento comercial y cumplir con todas las bases jurídicas, el consignatario debe realizar y supervisar las siguientes operaciones:
- Gestionar todos aquellos permisos y tramitar toda la documentación para importar y exportar en la aduana correspondiente.
- Planificar y coordinar las actividades que realizan los estibadores portuarios.
- Gestionar los servicios del buque para que el transporte se lleve a cabo de manera eficiente.
- Controlar el mantenimiento y encargar las reparaciones que necesita el navío para su correcto funcionamiento.
- Asistir al capitán del buque para contactar con la capitanía marítima en los casos en los que sea necesario.
Ahora ya sabes qué es un consignatario y por qué es una figura tan importante en el transporte marítimo. Si te interesa el transporte internacional de mercancías y estás pensando en dedicarte profesionalmente, cursa el ciclo formativo de grado superior de Comercio Internacional. Aprenderás a planificar los procesos de importación y exportación de una empresa, gestionando los medios de transporte y los mecanismos de pago empleados en el comercio entre países.