La capitalización del paro o pago único es una medida aprobada por el Gobierno con el objetivo de fomentar y facilitar la iniciativa de autoempleo entre la población desempleada. Se basa esencialmente en recibir el importe pendiente de la prestación por desempleo (o una parte importante de él) en un solo pago único.
Aunque pueda sonar raro, cada vez más gente decide cobrar su prestación de esta forma pues puede ser una opción muy interesante si, por ejemplo, estás pensando en emprender un negocio propio. A continuación te lo contamos todo sobre la capitalización del paro para que tú también puedas disfrutarla.
Quién puede beneficiarse de la capitalización del paro: Requisitos
La cantidad de beneficiarios posibles de la capitalización del paro ha aumentado en los últimos años: desde personas que buscan iniciarse como autónomos a socios trabajadores en cooperativas y sociedades laborales. A continuación te presentamos los requisitos necesarios para beneficiarte de esta medida:
- Ser beneficiario de la prestación contributiva por desempleo, debido al cese total y definitivo de la actividad laboral.
- No estar dado de alta en la SS, ni haber comenzado una actividad económica.
- Tener pendiente recibir (como mínimo) 3 meses de la prestación por desempleo.
- No haber pedido la capitalización del paro en los últimos 4 años.
- No haber impugnado tu despido o haber resuelto ya tu expediente.
- No haberse beneficiado de la prestación por desempleo al mismo tiempo que se trabajaba por cuenta propia en los 24 meses anteriores a la solicitud de la capitalización del paro.
- Iniciar la actividad económica en el plazo máximo de un mes desde la resolución positiva de la capitalización del paro. Sin embargo, uno se puede dar de alta en la SS e iniciar la actividad laboral una vez realizada la solicitud.
Si te han interesado estos consejos sobre finanzas, te invitamos a echar un vistazo al ciclo formativo de grado superior de Administración y Finanzas de la FP Jesuïtes en colaboración con la UOC, y aprender todo lo necesario para gestionar y administrar los procesos contables, fiscales, comerciales y financieros de una empresa.