Dentro del universo de la Integración Social encontramos la intervención social. Una intervención social quiere producir cambios, como respuesta a un conflicto o como parte de un proceso para resolver un problema. Pero en el caso de una intervención social, no queda todo ahí, hay algo más.

¿Qué es una intervención social?

La definición de intervención social la describe como una actuación que intenta reparar las carencias estructurales y sistémicas de un entorno social. Estas deficiencias suelen tener una repercusión negativa en este entorno y en toda la sociedad.

La metodología de la intervención social se focaliza en lo social

El concepto de intervención social se centra en los sistemas sociales, que no son otra cosa que el conjunto de los elementos que interaccionan con alguna finalidad en la sociedad. Es cuando estos elementos no pueden conseguir su finalidad, cuando se generan efectos negativos en la sociedad. Es en ese punto cuando es necesaria la intervención social.

Cuando el sistema educativo, por ejemplo, no consigue la promoción individual y social, surge el fracaso escolar, la marginación social… O cuando el sistema urbanístico no logra su finalidad, una vivienda digna, sus consecuencias son los barrios degradados o el chabolismo.

Los objetivos de la intervención social es solucionar los problemas del sistema social para resolver los problemas que se derivan de él en los individuos que forman parte de él. Gracias a estrategias y técnicas, la intervención social consigue el cambio social y el cambio individual.

 

Objetivos, elementos y dimensiones de la intervención social

El objetivo principal de la intervención de carácter social es el de la prevención y/o rehabilitación de aquellas situaciones que generen exclusión social. El método para conseguirlo se basa en diagnosticar, programar, desarrollar y evaluar.

Toda intervención con carácter social está compuesta por unos elementos:

  • Una técnica planificada con medios sociales: uso de fuentes sociales que ayuden o apoyen a la explicación, la interpretación, la información…
  • Una metodología: planificación, objetivos y valores.
  • Una naturaleza científica: evaluación de todas las acciones llevadas a cabo según criterios científicos.

Además de los objetivos y los elementos de la intervención social, encontramos las dimensiones. Toda intervención de carácter social debe tener actividades diversificadas y simultáneas en cinco dimensiones que hay que tener en cuenta en toda metodología de la intervención social:

  1. El sujeto
  2. El ambiente
  3. La organización del servicio
  4. La comunidad social en su conjunto
  5. El marco político-institucional

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