Está presente, sí. Está de moda. Se percibe en el ambiente. Si fuera un valor bursátil estaría alcanzando registros de récord. Es la moda, es lo que se lleva. Pero, ojo, no confundir con otras modas: no se trata de un convencionalismo o de un resultado del azar. Está en la cresta de la ola por méritos propios. Estamos hablando del aprendizaje cooperativo, nuevo summum de la pedagogía moderna.

Pero… ¿por qué? Bueno, no anticipemos respuestas precipitadas, lo mejor será empezar por otra pregunta más sencilla: ¿qué es el aprendizaje cooperativo? ¿en qué consiste? Para responder a esta cuestión recurramos a una definición comúnmente aceptada: “es el proceso de aprendizaje en el que, asumiendo las flaquezas y las virtudes de cada uno, la cooperación entre varios individuos genera sinergias y éstas contribuyen a la obtención de un resultado mejor”.

Pero profundicemos un poco más. Delimitemos el alcance de nuestra definición. Vayamos punto por punto para aprender las mejores técnicas de aprendizaje cooperativo.

El Aprendizaje Cooperativo en la Educación

– Proceso de aprendizaje: es el procedimiento o lapso de tiempo a través del cual uno o varios individuos adquieren conocimientos o habilidades mediante distintas técnicas pedagógicas.

– Flaquezas propias: es fundamental conocer las debilidades de uno mismo. No vale la pena engañarse a uno mismo: eso penaliza al grupo y especialmente al artífice del engaño. Por el contrario, la sinceridad y la humildad en un ambiente de buen aprendizaje cooperativo son elemento fundamental del éxito de esta técnica.

– Virtudes: puede predicarse lo mismo que de las flaquezas. Es absurdo fingir una serie de cualidades que uno no tiene para aparentar ser mejor. Y aparte de absurdo, es improductivo. Igual que con los defectos: ser sincero ayuda mucho mientras que mentir siempre acaba por derrumbar el edificio.

– Cooperación: es el momento de aplicar la lógica. Si sabemos en qué es bueno cada miembro del equipo sólo hace falta distribuir las tareas de manera eficiente. Como en toda técnica pedagógica, existen diversos estadios de complejidad de la técnica: des de la simple distribución de tareas en función de virtudes y defectos hasta mecanismos de participación grupal en determinadas tareas con el fin de crear un valor añadido, pasando por técnicas en que los miembros del grupo se hacen mejores los unos a los otros enseñándose habilidades y conocimientos los unos a los otros.

– Sinergias: aumento de la eficacia y la eficiencia debido a la cooperación de varios individuos. Se trata de un término que clásicamente se ha atribuido a la economía en materia de cooperación en la empresa. En este caso, la situación es perfectamente transportable a un grupo de estudiantes que desarrolla un aprendizaje cooperativo para lograr un objetivo común.

– Resultado mejor: es la causa principal. El objetivo más lógico del mundo. Si rendimos más, hagámoslo. Si somos más productivos, implementémoslo. Si aunar las virtudes de todos en un único grupo mediante el aprendizaje cooperativo mejora el rendimiento, no perdamos más tiempo. Si la suma de individualidades aporta un valor añadido, ¿a qué estamos esperando?

Ventajas del Aprendizaje Cooperativo

Y ahora sí, ya podemos volver a nuestra duda inicial: ¿por qué? ¿acaso el aprendizaje cooperativo es mejor que los métodos tradicionales? Pues bien, este aprendizaje tiene numerosas ventajas que recomiendan en gran medida su funcionamiento. Veamos algunas de ellas:

– Vida real: en la mayoría de puestos de trabajo del mercado laboral se trabaja en equipo. Es la norma, no es una opción. Aprender los mecanismos del trabajo en equipo antes de saltar al mundo laboral siempre aporta ventajas.

– Interacción: el hombre es un animal social por naturaleza. Solo no es nadie. Necesitamos a los demás. La interacción nos hace mejores. Por eso es importante ponerlo en práctica con frecuencia.

– Aumento de la productividad: como ya hemos señalado, la colaboración, las sinergias, generan un aumento del rendimiento y la productividad que como trabajadores ambiciosos siempre debemos perseguir.

– Espíritu de equipo / proyecto común: no hay mayor incentivo o motivación que el sentido colectivo de pertenencia: uno de los instintos más básicos del hombre, sentirse parte de algo. Percibir que lo que uno hace no cae en saco roto, sino que forma parte de algo más grande nos reta a seguir hacia delante.

En FP JE UOC apostamos por el aprendizaje cooperativo en el aula como herramienta de formación de nuestros alumnos. Consulta cuáles son los mejores ciclos formativos de grado superior y mejora tus aptitudes profesionales.