A partir del 25 de mayo de 2018 entra en vigor en España y en toda Europa la nueva ley de protección de datos. Esta ley, con las siglas RGPD, de Reglamento General de Protección de Datos, afecta a todas las empresas que utilicen datos de ciudadanos europeos. El objetivo de la nueva ley es el de unificar los derechos y las obligaciones en materia de protección de datos. Es el fin del cumplimiento de 28 legislaciones diferentes en Europa, una única ley para todos.

 

A quién afecta y en qué consiste la nueva ley de protección de datos

La RGPD afecta a todos los ciudadanos que viven en la Unión Europea y todas las empresas que, independientemente de dónde sean, guarden, usen, gestionen o recojan cualquier tipo de dato de los ciudadanos de la UE. De forma especial, esta ley afecta a los profesionales de la Administración de Sistemas Informáticos en Red ya que serán los responsables de hacer las adaptaciones necesarias para cumplir con ella.

A partir de ahora y gracias a la nueva ley de protección de datos, los usuarios tendrán más derechos sobre el uso de sus datos. Al mismo tiempo, la GPDR dará más poder a las agencias de protección de datos de cada país.

 

Novedades de la RGPD

La nueva ley aporta muchas novedades, entre las que destacamos las siguientes:

  • Derecho al olvido: como ciudadano de la Unión Europea podrás solicitar y conseguir que tus datos sean eliminados. Siempre que no sean tratados para el fin con el que se guardaron, cuando se retire el consentimiento o cuando se recojan de forma ilícita.
  • Derecho a la portabilidad: Si los datos están en manos de una empresa y son tratados de forma automatizada, podrás recuperarlos en un formato óptimo para cederlos a un tercero. Digamos que el caso más común sería el de traspasarlos a un nuevo proveedor, por ejemplo.
  • Derecho al acceso de tus datos: A partir de ahora, podrás pedir a las empresas que te digan si tus datos están siendo procesados, dónde y con qué objetivo. Al mismo tiempo, podrás pedir una copia de tus datos personales sin coste alguno.

 

Otra de las novedades más destacadas que veremos en nuestro día a día, será el fin de las casillas premarcadas o el lenguaje incomprensible de las condiciones de uso de datos personales. Con la nueva ley de protección de datos, cuando te des de alta en un servicio, web, aplicación o producto, deberás aceptar por un lado términos de uso y, por otro, lo relativo al tratamiento de datos.